Quizás se trate solo de eso.
Seguir las huellas que me indiquen hacia donde caminar ahora que parece que todo queda en suspenso.
Aquí intento guarecerme.
Es mi propio rincón,donde recibo a quienes quieran descansar un rato.
Bienvenidos a todos.
Breve y conciso. Esa etapa de nuestra vida se recuerda, se añora; fue cuando teníamos las manos y el corazón, abiertos a todo quién se acercara, sin prevenciones ni sospechas. Todo era lindo, como el dulce de leche. Me gustó.
Dejar caer la infancia, para juego de quien recoge... Hermoso, Luna.
ResponderEliminarBreve y conciso. Esa etapa de nuestra vida se recuerda, se añora; fue cuando teníamos las manos y el corazón, abiertos a todo quién se acercara, sin prevenciones ni sospechas. Todo era lindo, como el dulce de leche. Me gustó.
ResponderEliminarUna amistad que perdura desde la infancia es un auténtico desafio al tiempo.
ResponderEliminarBonitas tus palabras, luna.
Un abrazo.
Así es...mi hermosa amiga de la infancia, reencontrándonos en esa foto después de 30 años....GRACIAS A TODOS.
ResponderEliminarPues que dure eternamente esa amistad!! Besosss
ResponderEliminarHomenaje conciso y escueto pero profundo y precioso.
ResponderEliminarPreciosa amistad y hermosa foto. Lindo homenaje a la infancia y ese reencuentro. Me alegra por las dos. Un beso grande.
ResponderEliminarPrecioso poema. Siempre hay una pelota con la que jugar escondida en los matorrales de la infancia. Besos!
ResponderEliminarBellisimos todos los comentarios! Gracias!
ResponderEliminarEs exactamente lo que quería transmitir..pocas palabras para algo grande y hermoso.
No podía ser de otro modo, regalar las palabras del alma a esa amistad.
ResponderEliminarUn abrazo, Luni.
Gracias mi Aurori!
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